Estamos en tiempo de Pascua, tiempo de celebrar la vida y la presencia de Jesús Resucitado. ¿Dónde lo encontramos? En la alegría que sentimos y también en la fuerza que recibimos para esperar y trabajar por lo que podemos construir juntos. Todos somos necesarios. Y juntos, confiando en el Señor de la Vida, podemos mucho más.
Recuerda hoy a las personas que son importantes en tu vida. Y no olvides que tú eres importante para los demás.